Últimamente estamos asistiendo a varias situaciones desagradables que se están produciendo en el servicio de Maternidad y Partos, situaciones provocadas por la mala gestión e hipocresía
que reina en la Gerencia de esta OSI, que lejos de intentar corregir o solucionar los problemas, lo que hacen es buscar culpables entre el personal de la plantilla.
- La Dirección de este Hospital se publicita, en la web de dicha OSI, los parabienes de parir en el Alto Deba. La existencia de una bañera de parto o la oferta de un parto cuya asistencia
puede adaptarse mucho a los deseos, preferencias o expectativas de las mujeres, humanizando la cara de un Hospital. Sin embargo, y tal como marcan las directrices suministradas por la
Supervisora del Servicio, “Solamente puede entrar 1 persona en el paritorio. Si nos encontramos con un caso de estos, se avisará a la supervisora de guardia para custodiar al niño o buscar
una solución”
Así que, si eres una mujer gestante y con una criatura pequeña, con lactancia, por ejemplo, y vienes a parir, te obligarán a dejarlo fuera de tu alcance, separándote de él, impidiendo de
esta manera, que la tan cacareada humanización del parto sea factible.
- Por otra parte, insisten en saltarse a la torera el DECRETO 147/2015, de 21 de julio, por el que se aprueba la Declaración sobre Derechos y Deberes de las personas en el sistema sanitario
de Euskadi, que en su Art. 4.c) dice, textualmente, tener derecho “A que toda intervención terapéutica se realice con su consentimiento libre y voluntario, y a decidir libremente entre las
opciones clínicas disponibles, incluida la de no hacer nada.” ¿Cómo una mujer se ha atrevido a ejercer dicho derecho? ¿Qué ocurre? ¿Es que en esta OSI la Gerencia es “sabia”? ¿No será
que sigue empeñada en una asistencia paternalista, que solo ve a “pacientes”, no a personas con capacidad de decidir sobre su salud?.
Por último, nos encanta que la Dirección nos recuerde que tenemos Protocolos, y que están para cumplirlos; eso sí, nos dejan no estar de acuerdo con ellos, porque de participar en su
elaboración, ni mentar. Y, como no puede ser de otra manera, si la urgencia del parto impide llevarlos a cabo en su totalidad, nos acusan de falta de profesionalidad; acusación que delata
el talante de esta Dirección.
Desde ESK, decimos: ¡Basta!
Exigimos respeto y calidad, así como responsabilidad a las direcciones antes los problemas que surgen en el día a día y se deje de culpabilizar a los trabajadores y trabajadoras.