Es urgente que las trabajadoras de hogar sean incluidas en el Estatuto de los Trabajadores en las mismas condiciones que el resto y en el Régimen General de Seguridad Social.

« Exigimos que todas las trabajadoras de hogar sean tratadas como lo que son, trabajadoras  con los mismos derechos  que el resto »

La ratificación del Convenio 189 de la Organizaciín Internacional de ltrabajo (OIT) del pasado día 9 de junio por parte del gobierno español, ha sido un punto de inflexión que va a suponer un cambio en la normativa laboral y de seguridad social para estas trabajadoras. Estos cambios afectarán a más de 28.000 trabajadoras en la CAV y en torno a 7.000 trabajadoras en Nafarroa.

La tan demandada ratificación ha vuelto a poner de manifiesto la grave discriminación que sufre el sector con respecto al resto de trabajadoras. Un sector, el de las trabajadoras de hogar, que reforma tras reforma ha sido constantemente ninguneado y al que se le ha negado sistemáticamente el reconocimiento de sus derechos laborales.

Once años ha tardado el gobierno español en ratificar el mencionado convenio y el que dice ser el gobierno más progresista de la historia en palabras de su Ministra de Trabajo ha manifestado su “voluntad de reformar esta normativa de manera urgente y que para 2023 estos cambios se hagan efectivos”. Estos cambios, sin embargo, poco tienen que ver con voluntades sino más bien con la necesidad de tener una legislación acorde a la normativa europea e internacional. En los últimos años se han emitido sentencias desde Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) en las que establece que la normativa española discrimina a este colectivo al no reconocerles derechos mínimos, como es el de no tener reconocida la prestación por desempleo.

Una reforma no es suficiente

No queremos que se reforme la actual regulación lo que desde hace años venimos exigiendo es que de una vez por todas las trabajadoras de hogar sean tratadas como lo que son, trabajadoras con los mismos derechos que el resto. No es una cuestión de reformar la situación actual, las trabajadoras de este sector no pueden seguir ni con una normativa laboral, ni en un régimen especial de seguridad social. Es urgente que estas trabajadoras pasen a estar incluidas en el Estatuto de los Trabajadores en las mismas condiciones que el resto y en el Régimen General de Seguridad Social.

« Es el momento de intensificar la lucha y exigir la  equiparación de derechos  »

Es el momento de las trabajadoras de hogar

En ESK siempre lo hemos tenido muy claro y este es el momento de poner en el centro del debate político la situación de discriminación y vulnerabilidad que se está ejerciendo sobre este colectivo. Una excepcionalidad, la de estas trabajadoras, que no se da en otros sectores y que no tenemos dudas de que se produce porque estos son trabajos realizados por mujeres y que están estrechamente vinculados a los cuidados. Este sin duda es el momento de intensificar la lucha y exigir la equiparación de derechos. Tampoco podemos seguir mirando para otro lado y dejando que el cuidado sea un negocio, que quieren mantener a costa de generar situaciones escandalosas de precariedad, y sin que la administración actúe de una vez por todas y se responsabilice de proporcionar los cuidados que necesitamos las personas en nuestras vidas mediante un sistema público de cuidados.

Esta postura es la que desde ESK vamos a llevar al conjunto de sindicatos, que el pasado día 9 junio nos reunimos en esa mesa negociadora creada en la CAV. Nuestro objetivo es el de dar una respuesta única y poner todos los recursos de las organizaciones para que el cambio que se avecina sea un cambio que reconozca por primera vez y de manera definitiva a este sector los derechos que les corresponde como trabajadoras.

¡Equiparación ya!