Desde ESK y la Plataforma contra la Exclusión Social Argilan-ESK consideramos que, con la aprobación del Real Decreto-ley que regula el IMV, el Gobierno  PSOE-Unidas Podemos ha dejado pasar una oportunidad histórica para avanzar la erradicación de la pobreza y la exclusión social en el conjunto del estado español.

Del dicho al hecho hay un gran trecho, así reza el refrán que mejor refleja el contenido de Real Decreto-Ley aprobado por el Consejo de Ministras y Ministros, por lo menos si lo comparamos con las declaraciones grandilocuentes con las que ha sido anunciado.

Este Ingreso Mínimo Vital lejos de contribuir a la justicia social y a la dignificación de las condiciones de vida de las personas empobrecidas continúa reforzando el vínculo entre  pobreza y criminalidad. Esta prestación, de nombre grandilocuente pretende cubrir  unos mínimos pero no sostendrá las vidas de quienes la cobren, va a ir acompañada de toda una batería de medidas de control. Medidas, que parecieran decirnos al conjunto de la población que la gente pobre  disfruta defraudando, no como esos prohombres que, mientras practican con intensidad la elusión  y evasión fiscales, donan  mascarillas y respiradores. 

El Ingreso Mínimo Vital, además, va a tener un grado de cobertura más que escaso. Además de todas las personas menores de 23 años que quedan excluidas, de las millones de personas condenadas a una situación administrativa irregular por la injusta la Ley de Extranjería excluidas también, la larga lista de exclusiones y los interminables y complejos requisitos conllevarán que, a la hora de la verdad, muchas personas precarias y en situaciones de necesidad no puedan acceder. 

El Ingreso Mínimo Vital, 462€ al mes para una persona que viva sola, y eso si es que llega a cobrarla, no son una herramienta con la pobreza. 462€ no van sacar a nadie de la miseria ni de la precariedad vital. Con 462€ al mes lo que sí consiguen es tranquilizar  la conciencia del mal gobernante, diciéndose a sí mismos que la gente, por lo menos, no se morirá de hambre.

La cobertura del IMV no llegará a muchas personas pobres

Llevamos semanas asistiendo a un baile de cifras que nos dice que van a acceder cientos de miles de personas pero, lo que no nos cuentan es que, a falta de concretar los números reales, no llegará ni a la cobertura del total de personas en situación de pobreza extrema. De nuevo eligen parchear en lugar de transformar y no podemos estar de acuerdo con eso. Nos parece un acto cobarde y una verdadera oportunidad perdida.

El Ingreso Mínimo Vital de este gobierno que se autoproclama de izquierdas y de progreso, obvia el fracaso histórico y el conjunto de problemas que todas las políticas de pobres acumulan. No sólo las ignora, sino que profundiza en ellas, legitimando argumentos que sostienen el odio al pobre que dicen querer combatir.  Esta propuesta de renta mínima, obvia las luchas y reivindicaciones que los colectivos sociales y sindicales de Euskal Herria (también en otros territorios y naciones del estado) hemos desarrollado contra rentas como la RGI en la CAPV o la RG en Nafarroa.

ESK y Argilan-ESK, desde nuestra realidad más cercana vemos, además, con mucha preocupación esta norma estatal que deberá ser convalidada por el congreso de los diputados en la medida en la que sienta unas bases escasas, débiles y muy problemáticas para poder avanzar en la pelea por una Renta Básica

Incondicional. De ser aprobada tal y como el gobierno la plantea va a ser utilizada, a nadie le quepa duda de ello, para que en la CAPV el PNV retome con ansias renovadas su proyecto de recorte de la RGI. Además, esta medida va a profundizar en situaciones de sobra conocidas por nosotras en las que el sistema que dice proteger es el que maltrata a las personas en situación de pobreza. 

Euskal Herria, 29 de mayo de 2020

ESK  Sindikatua / Argilan-esk