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Esta mañana en la mesa sectorial de Osakidetza, los sindicatos SATSE, SME y UGT han firmado con la Administración un acuerdo de una OPE de 3300 plazas (3000 para libre y 300 de Promoción Interna), así como la convocatoria de un concurso de traslados con el 90% de las plazas convocadas a OPE. Para ESK este acuerdo es insuficiente por los siguientes motivos:

EN MATERIA DE EMPLEO

• Si bien, ésta  convocatoria de 3000 plazas es superior a las OPEs anteriores, continúa muy por debajo de lo que necesita el sector y de lo que es posible ya que no supone coste económico para la Administración. Actualmente trabajamos 35.000 personas, de las cuales 14.000 (cerca del 40%) tenemos carácter eventual. Siendo, una parte importante de ellas (más de 5000) puestos estructurales.
• Pero hay más. Esta propuesta está a años luz del objetivo de reducir la temporalidad al 8% como en el estado. Cuando recientemente el Tribunal europeo ha declarado fraudulenta una gran parte de la contratación en la Administración Pública por qué Osakidetza se resiste a definir todas las vacantes que son estructurales para rebajarla a ese porcentaje como  el estado. ¿A quién echaran ahora la culpa cuando todas sus justificaciones en el pasado han venido por las imposiciones que llegan de Madrid?
• Si bien valoramos positivamente que  incorpore plazas de operarios de servicio, cocinero y de mantenimiento, éstas son insuficientes como queda acreditado por el chantaje que lanza al ofrecer más plazas de estos colectivos a cambio de aceptar la privatización de las cocinas. ¿Si es posible porque no se sacan?

EN LA PRIVATIZACION

• Osakidetza de forma autoritaria incumple sus acuerdos de no privatizar nuevos servicios. Se reafirma en su intención de privatizar la cocina del hospital de Urduliz a pesar de que el OARC ha resuelto petición de ESK anular las licitaciones de la cocina, lavandería, plancha y limpieza de ese centro.
• Además, lo hace de la única manera que saben: imponiendo y sin aportar a los ciudadanos y ciudadanas estudios de impacto económico y de calidad que las justifiquen.  Y no lo hace porque esos estudios concluirían que la privatización, hoy en día, suponen una sobrecoste para las arcas públicos, un deterioro de  la calidad del servicio y un aumento de la precariedad de sus trabajadores/as. Así quedó demostrado en la privatización de la cocina del hospital de Nafarroa. Una cocina devuelta al ámbito público hace tan solo unos meses. No les hace esto pensar un poco.

EN MATERIA DE RECORTES PENDIENTES

Osakidetza no dice una sola palabra sobre

• Resolución de la convocatoria de desarrollo profesional del 2011 que genera una fuerte discriminación y malestar en el personal.
• Contratar desde el primer día. Una decisión que pone en riesgo la salud de los/as profesionales de Osakidetza por los ritmos a los que se nos somete y, pone en riesgo la calidad del servicio que ofrecemos a la ciudadanía.
• De no penalizar por caer enfermo.
• De recuperación del poder adquisitivo durante la crisis. Etc…

En definitiva un acuerdo insuficiente que da oxigeno a Osakidetza y que le permite lavarse la cara con esta OPE tardía y escasa, mientras deja sin resolver problemas de calado como la privatización de servicios, la estabilidad real de la plantilla  y la recuperación de los recortes robados durante la crisis, que mantienen un alto grado de precariedad en el sector contra el que hay que seguir luchando.

Consideramos que se ha desaprovechado una oportunidad con la unidad sindical que había,  al dejar para un futuro la resolución de problemas importantes. Un futuro sin definir y con una Administración con una elevada vocación de no respetar lo acordado.

ESK continuará animando a los trabajadores/as a movilizarse hasta conseguir la recuperación de los derechos robados, unas condiciones laborales dignas y unos servicios 100% públicos.

Barakaldo a, 23 de junio de 2017.