El colectivo de bomberos y bomberas de Álava denuncia falta de personal, incumplimientos de acuerdos, apertura de expedientes disciplinarios y falta de formación.

El colectivo de bomberos y bomberas forales de Álava, tal y como hicimos hace algo más de 1 año, se ha reunido de nuevo hoy en la Plaza de la Provincia de Gasteiz para denunciar la grave situación a la que diariamente nos estamos enfrentando, tanto en la actividad diaria en nuestros parques como en las intervenciones a las que acudimos como servicio de emergencias que somos.

Nos sentimos muy orgullosos de formar parte de un servicio público y profesional, que ofrece cobertura a todo el Territorio Histórico y que, después de mucha lucha, ofrezca un servicio las 24 horas del día pero, tras varios años baldíos y siendo conocedores del camino que lleva nuestro servicio, creemos que hay flagrantes carencias y deficiencias que la población a la que nos debemos y damos cobertura debería saber.

Falta de personal

Situaciones de falta de personal que hagan frente a las necesidades mínimas establecidas para dar un servicio adecuado y de calidad a la ciudadanía alavesa y que, a la vez, no constituya un riesgo hacia los intervinientes al no poder mantener unos estándares básicos de seguridad. Son numerosos los días en los que, aun pudiéndose prever estas situaciones, no se les ha dado solución por culpa de una mala o nula gestión. Esto deja en una situación muy precaria nuestro servicio de bomberos y bomberas y lo convierte, sin duda, en el servicio con peores condiciones de toda la CAV, tanto laborales como de seguridad.

Sumado a ésta problemática, quizás la más importante, nos encontramos con que la jefatura y dirección de este Organismo pretende ofrecerse como abanderado de un proyecto de oferta pública de empleo conjunta de bomberos y bomberas de todo Euskadi. Un proyecto al que, sin duda, le queda aún muchísimo tiempo para formarse y madurar, al menos para ejecutarse de una manera justa y eficaz tanto para lxs opositores aspirantes como para los servicios que se nutrirán de dichas personas. Y tiempo es lo que no tenemos en Bomberos y bomberas Forales de Alava. El porcentaje de interinidad en nuestro servicio es altísimo y además, por si fuera poco, sufrimos constantes “fugas de cerebros” de compañeros y compañeras que, buscando el servicio de calidad que aquí no se ofrece, no dudan en volver a enfrentarse a las duras pruebas necesarias para conseguirlo y marcharse.

Incumplimientos y expedientes disciplinarios

Situaciones de negociación de condiciones laborales en las que, a pesar de haber sido acordadas en reuniones con la junta de personal, la empresa incumple de manera unilateral lo cual ha provocado que dichas mesas de negociación sean un mero escenario donde los representantes de los trabajadores ya no queremos seguir siendo engañados ni que nos falten al respeto.

Lamentables situaciones de ataques directos a compañeros y miembros de la junta de personal en forma de expedientes disciplinarios, o amenazas reiteradas de éstos, siendo totalmente desproporcionados y perfectamente orquestados por la dirección y jefaturas de éste organismo autónomo.

Falta de formación

Situaciones de falta de formación adecuada para realizar labores concretas que precisan de conocimientos específicos y a los que, a día de hoy, la dirección y jefatura del servicio no ha sabido dar respuesta. Son varias y diversas las competencias que asumimos y, por desgracia, no en todas podemos decir que contamos con los medios y formación adecuadas para realizar nuestro trabajo con seguridad, resultando esto además un perjuicio para el óptimo desarrollo de nuestras intervenciones.

Es por todo esto por lo cual, el colectivo de bomberos y bomberas forales de Álava nos encontramos hoy aquí. Para poner de manifiesto de cara a la ciudadanía estas situaciones que llevamos ya mucho tiempo intentando solucionar de manera interna pero que, a día de hoy, consideramos que ya no pueden seguir sin obtener solución. Esa solución pasa porque quienes hoy se encuentran al mando de éste servicio decidan escucharnos y entender nuestras ideas y motivaciones de cómo debe funcionar de manera eficaz y profesional un servicio de emergencias, ya que ha quedado demostrado que su manera de gestionarlo es el motivo por el que nos encontramos en esta lamentable situación. Y si uno no es parte de la solución, está claro que es parte del problema.

Nuestro trabajo es prestar un servicio a la población en forma ininterrumpida, 24 horas al día, 365 días al año y nuestras denuncias tiene como único fin el de conseguir el servicio público digno, profesional y de calidad que la sociedad alavesa reclama y se merece. Por ello, no vamos a parar hasta conseguirlo y lo defenderemos aquí y donde sea necesario.

ESK, ELA, LAB