Los ayuntamientos tienen la obligación de empadronar, y las personas que viven en cada municipio el derecho y el deber de empadronarse. Es interés y tarea de todas y todos que esto se cumpla.
CAMPAÑA ¡SOY TU VECINA, PERO SIN PADRÓN NO EXISTO!
PRESENTACION EN RUEDA DE PRENSA Y MANIFIESTO
A toda la sociedad bizkaina, a todos los movimientos sociales, grupos políticos, sindicales,ONGs, asociaciones del tercer sector, organizaciones religiosas, y a toda persona que valore la defensa de todos los derechos para todas las personas.
Los ayuntamientos tienen la obligación de empadronar, y las personas que viven en cada municipio el derecho y el deber de empadronarse. Es interés y tarea de todas y todos que esto se cumpla. En la tipología para personas sin hogar y exclusión residencial, elaborada por la Federación Europea de Organizaciones Nacionales que Trabajan con Personas sin Hogar (FEANTSA), se recoge el caso de vivir en una vivienda sin título legal (con familiares o amigos de forma involuntaria o sin contrato de arrendamiento). La mayoría de las personas que viven en Bizkaia en esta situación no pueden empadronarse y para la administración no existen. Pero existen. Viven en nuestros barrios y pueblos.
¿Por qué es necesario el empadronamiento?
El padrón no es solo un papel, es la puerta de entrada para el acceso a muchos derechos. Sin padrón
se dificulta o se hace imposible:
el acceso a la salud (tarjeta sanitaria, ambulatorio de referencia);
el acceso a la educación básica de menores (asignación de centro escolar) y a formaciones
oficiales y cursos de Lanbide;
el acceso a prestaciones sociales básicas;
la obtención del permiso de residencia tras tres años de arraigo, que pondría fin la situación
de irregularidad administrativa;
ejercer, en su caso, el derecho a voto;
casarse o constituir una pareja de hecho;
…
¿Por qué no pueden empadronarse muchas personas?
Sabemos que para muchas personas resulta complicado, imposible incluso, conseguir el padrón:
personas que viven en un piso por solidaridad, parentesco, amistad, que no son empadronadas por diversas razones y que tienen que “pagar el padrón” en otra vivienda.
personas que viven en el domicilio donde trabajan en régimen interno en tareas de hogar y cuidados y las personas empleadoras les niegan el derecho a empadronarse.
personas que viven en una casa en la que algún miembro está percibiendo la RGI y temen que al empadronar a otra persona sus ingresos se vean reducidos.
personas que viven en alquiler a quienes, por las razones que fueran, el propietario impide empadronar;
personas sin pasaporte en vigor;
Sabemos que esto está originando grandes abusos a nivel de personas individuales, un auténtico comercio por el que se cobra un plus al alquiler de una habitación con empadronamiento y 150€ mensuales solo por empadronamiento sin habitación (en Bilbao puede ser más).
También existe un entramado de discriminaciones ilegales, por razones racistas, en el que incurren muchas personas propietarias y algunas agencias inmobiliarias, poniendo demasiados impedimentos para alquilar pisos y proponiendo el alquiler de pisos y habitaciones sin padrón.
¡La situación es insostenible!
Es necesario encontrar una solución.Sin embargo también sabemos que existen experiencias y normativas de algunos ayuntamientos que
facilitan el empadronamiento en casos similares. En Barcelona, por ejemplo, el Ayuntamiento realiza un “Informe de conocimiento de residencia en el municipio” cuando la persona no reside de manera continuada en la misma vivienda y no puede acreditar ningún tipo de documentación relativa al domicilio. Con dicho informe se realiza el empadronamiento social en una dirección de un Centro de Servicios Sociales municipal.
Queremos que en toda Bizkaia se haga lo mismo; no sólo que lo hagan unos pocos ayuntamientos mientras que el resto se desentiende o, incluso, sugieren ir a los ayuntamientos que sí lo hacen. Solicitamos a todos los ayuntamientos y a la Asociación de Municipios Vascos EUDEL la puesta en marcha de un protocolo que garantice el empadronamiento de todas las personas que viven en el municipio y que no pueden hacerlo por los requisitos actualmente en vigor. Coincidimos en que, tanto la obligación de los ayuntamientos de empadronar como el derecho y el deber de todas las personas de empadronarse, debe ser llevado a cabo sin dilación, es bueno para los municipios y para todas las personas que vivimos en ellos.
Sin duda la ley de padrón permite flexibilidad, es posible encontrar una solución consensuada entre los ayuntamientos y el movimiento asociativo. Es una gran verdad, lo de que “querer es poder”. Queremos empezar la campaña con los mayores apoyos posibles. La llevaremos a cabo a nivel institucional y a nivel popular para que nadie tenga que decir:
¡SOY TU VECINA/O, PERO SIN PADRÓN NO EXISTO!
¡Súmate a la campaña!
Bilbao, 12 de mayo de 2023