Tras la sentencia que da la propiedad de estas empresas a sus acreedores, exigimos la implicación de las instituciones para garantizar su futuro y asegurar los derechos y condiciones de las plantillas.

«  Exigimos a las instituciones  que sean garantes del mantenimiento de la actividad, del empleo, condiciones laborales y futuro de las plantas »

Tras la sentencia del Juzgado de lo Mercantil nº2 de Barcelona mediante la cual se homologa el plan de reestructuración de los fondos de inversión del Grupo Celsa, las secciones sindicales de LAB, LEKU, ELA y ESK de Nervacero y Laminaciones Arregui, ambas empresas de Euskadi pertenecientes al Grupo Celsa, exigimos a las instituciones que sean garantes del mantenimiento de la actividad, del empleo, condiciones laborales y futuro de las plantas del Grupo Celsa, especialmente de Nervacero y Laminaciones Arregui.

Esta parte ha desconocido y desconoce el contenido tanto del plan de reestructuración que tenía el Grupo Celsa, como el aprobado por la sala, el de los fondos de inversión, también sus garantías para con las plantillas.

Futuro incierto

Como hemos dicho anteriormente, nuestra prioridad son los y las trabajadoras, y esta sentencia por sí sola no evita el clima de incertidumbre sobre nuestro futuro. Si bien no esperamos grandes cambios a corto plazo, es el medio y el largo plazo el que nos preocupa. Independientemente de que la propia sentencia dicte que deben de mantener el empleo sin alterar los centros estratégicos de decisión, esto no va a tener un carácter indefinido, por lo que nuestra mayor preocupación es lo que pueda suceder en el tiempo.

Son las instituciones las que deben de ser garantes de que eso se cumpla. Conocemos ya la intención del gobierno español de iniciar negociaciones con los fondos de inversión sobre la viabilidad futura, así como el mantenimiento del empleo y consideramos que en esas negociaciones debe de participar y tenerse en cuenta a la representación de los y las trabajadoras.

Implicación del Gobierno Vasco

Tampoco el Gobierno Vasco puede eludir su responsabilidad, debe mantener una actitud proactiva en este conflicto, velando por los intereses de los y las trabajadoras de Nervacero y Laminaciones Arregui, y del mismo modo, con la participación de la representación social.

Por ello, las secciones sindicales de LAB, LEKU, ELA y ESK con representación en Nervacero y Laminaciones Arregui, en una de las primeras acciones después de la sentencia, hemos solicitado una reunión al Departamento de Industria en la que trasladarles la necesidad de su implicación en este nuevo escenario.