ESK estará, una vez más, en las calles de Bilbo el sábado, 7 de enero, exigiendo el respeto a los derechos humanos de los y las presas vascas.

« Son muchos los  objetivos pendientes  y su solución depende del empuje de las mayorías políticas, sindicales y de la movilización social »

Tras más de dos años sin poder reunir a decenas de miles de personas el mes de enero, el 7 de enero, se volverán a llenar las calles de Bilbo de esperanza en alcanzar la convivencia y de exigencia de respeto a los derechos humanos cuya vulneración afecta a los y las presas vascas y a sus personas allegadas.

Ahora es el momento, porque son muchos los objetivos pendientes y su solución depende del empuje de las mayorías políticas y sindicales vascas, pero también y fundamentalmente, de la movilización social.

En los últimos años se ha conseguido avanzar y está cerca el objetivo de poner fin a la política de alejamiento, una de las vulneraciones de derechos que durante décadas se han sufrido.

7 de enero Bilbo

Este 7 de enero, y a partir de ese día, pondremos nuestros esfuerzos en conseguir la aplicación de una política penitenciaria ordinaria, que desterré para siempre la excepcionalidad que se ha venido aplicando hasta el momento.

ESK aportaremos nuestro granito de arena y participaremos en todos los actos convocados, además de animar a nuestra afiliación y militancia a participar de la movilización que llenará la calle Autonomía a las 17:00 h. desde la Casilla hasta Zabalburu, iniciando una manifestación hasta el Ayuntamiento de Bilbo, con el lema “Etxera bidea gertu” para expresar juntas un clamor en favor de la paz, convivencia y resolución.

Todos los derechos para todas las personas.