Casi un año después de denunciar las condiciones en las que tenían que trabajar los compañer@s celador@s y conductor@s del servicio de ambulancias del Hospital Universitario Basurto en los días de invierno y lluviosos, el hospital les ha proporcionado ropa de trabajo con la que protegerse frente a las inclemencias del tiempo. La misma cuenta también con elementos reflectantes para reducir el riesgo de atropello.
Pese a la petición realizada por ESK sindikatua, y ya recogida en propuestas de mejora realizadas por la Unidad Básica de Prevención en un lejano 2017, la dirección del hospital hacía oídos sordos, lo que nos obligó a denunciarla ante inspección de trabajo por no proporcionar ropa adecuada a sus trabajadores.
Pese a haberse solucionado en parte el problema, a ESK no nos agrada la forma en la que se está decidiendo a quien entregar la ropa de abrigo y a quien no. Parece ser que si tu contrato no es lo suficientemente largo no se te entrega. Ni que tener un contrato de menor duración implicara que el riesgo de atropello o el frío que pasas fuese a ser menor.
Desde ESK hemos solicitado a la UBP que se entregue la ropa de abrigo y reflectante desde el primer día de contrato, tal y como se recoge en el Acuerdo Regulador de Condiciones de Trabajo de Osakidetza y en la normativa estatal sobre disposiciones mínimas de seguridad y salud relativas a la utilización por los trabajador@s de equipos de protección individual
Asimismo, se ha solicitado que la ropa de abrigo se entregue al personal de reparto de comida, que también trabajan a la intemperie como los compañer@s de ambulancias, almacén o reparto de farmacia.
En caso de que la mencionada problemática no se resuelva de manera inmediata volveremos a denunciar a la empresa ante inspección de trabajo por incumplir la normativa.
Está claro que la actual dirección sólo responde a los problemas tras denuncias a instancias superiores, lo que dilata el proceso hasta límites insospechados. ESK seguirá peleando para mejorar las condiciones de trabajo de todo el personal del Hospital Universitario Basurto.