A la gerencia, dirección de personal, dirección de enfermería y salud laboral del hospital de Cruces.
El sindicato ESK del Hospital de Cruces considera que el local del retén de celadores y celadoras no reúne las condiciones idóneas de un puesto de trabajo por las siguientes razones:
- Está ubicado en el Sótano I junto a la Urgencia y contiguo a un cuadro eléctrico.
- Esta ubicación en una zona interior supone carecer de ventilación y de luz
- El sistema de aireación instalado para paliar las elevadas temperaturas de esa zona resulta insuficiente con el inconveniente añadido de que, desde el lugar elegido para su instalación, crea problemas al incidir el aire frío directamente sobre el personal. Además, en este momento de crisis sanitaria es un elemento de expansión del virus en el aire.
- Por otra parte, también la renovación del aire es
- El cierre del acceso al servicio de Nefrología de Crónicos ha creado un problema añadido en nuestra opinión, ya que, en caso de necesidad de evacuación del personal por un incendio generado en la zona de la urgencia, no habría
- Por último, el espacio contiguo al retén resulta inadecuado para almacenar los utensilios habituales de trabajo, como las grúas, los carros de recorrido… que se encuentran hacinados e incluso dificultan el acceso al servicio de Nefrología. No hay espacio para situar unas sillas de ruedas, lo que nos obliga a buscarlas por el hospital cuando el servicio lo requiere, retrasando enormemente nuestro
Su ubicación, sus dimensiones y el sistema de aireación han puesto de manifiesto durante la crisis sanitaria por coronavirus el elevado riesgo de contagio que han sufrido los celadores/as del reten ya que era imposible respetar las distancias mínimas de seguridad. Para ellos mismos y para el resto de trabajadores/as y usuarios/as del hospital ya que los convertía en un vector de transmisión ya que nuestro trabajo se realiza en todas las unidades del hospital. Disponer de un puesto de trabajo en condiciones es una vieja reivindicación de este colectivo, que vemos pospuesta una y otra vez.
FALTA DE EPIs, PROTOCOLOS DISCRIMINATORIOS, FALTA DE PERSONAL…
Este contratiempo es otro más dentro de las diferentes afrentas que lleva sufriendo el colectivo desde que comenzó la crisis: falta de mascarillas y EPIs para realizar el trabajo en condiciones, la necesidad de refuerzo en un turno de noche desbordado, la negativa a realizar Test al personal o el tener que trabajar con material defectuoso, sin olvidar el hecho de catalogar al celador como personal “de bajo riesgo” en todos los protocolos, cuando su grado de relación con el paciente es más que alta. Agravios todos que llevamos semanas denunciando desde ESK.
Por ello, además de la denuncia a la dirección, ya hemos iniciado los trámites para interponer otra denuncia en Inspección de Trabajo, y en los próximos días iniciaremos una recogida de firmas entre el personal celador para visibilizar el malestar de los trabajadores y trabajadoras. Una posibilidad puede ser una concentración en el hall principal, respetando la distancia de seguridad, para entregárselas al gerente