Desde ESK asistimos perplejos a las declaraciones que parten del Departamento de Salud, según las cuales, la Atención Primaria va a cobrar un protagonismo relevante a partir de ahora, en la gestión y contención de la pandemia por coronavirus.

Parece ser que nuestros gestores han descubierto ahora el enorme potencial de los Equipos de Atención Primaria, y van a ser estos los encargados de realizar los test entre la población que atienden, así como llevar adelante el control de las personas enfermas de su zona.

Ante este sobreesfuerzo asistencial, la señora Murga no ha especificado en ningún momento cómo van a dotar a esos Equipos de Atención Primaria, ni que recursos asistenciales, ni humanos ni materiales, van a destinarse a esta nueva tarea asignada.

Para ESK, esta declaración de intenciones es un brindis al sol. Partimos de la realidad de una Atención Primaria que, desde hace años, ha sido infradotada por parte de los diferentes responsables del Departamento de Salud y de Osakidetza; Atención Primaria que ha sido vaciada de sus cometidos, que no son otros que la Promoción de la Salud y Prevención de la Enfermedad; situación que llevó a los y las profesionales de Atención Primaria a organizarse en una plataforma, Lehen Arrreta Arnasberritzen, con más de 60 puntos reivindicativos cuyo único objetivo es mejorar la calidad de la asistencia que la Atención Primaria ha de dar al conjunto de la ciudadanía; reivindicaciones que, a pesar de tres huelgas convocadas junto con ESK y diferentes organizaciones sindicales, no han sido tenidas en cuenta, a día de hoy, por la Consejera Murga.

ESK exige compromisos serios, no nos valen propuestas vacías de contenido, que lo único que buscan es una pose mediática. Para ESK, es imprescindible que se dote a la Atención Primaria de un Plan Integral, dónde se aborden cuestiones que, más allá de responder a la crisis sanitaria actual, refuercen el papel de la Atención Primaria dentro de un Modelo Asistencial donde prime la Promoción de las Salud y la Prevención de le Enfermedad, dotándola de los imprescindibles medios humanos y materiales para prestar la atención sanitaria que se merecen los y las ciudadanas.