Desde ESK llevamos tiempo denunciando que los problemas que sufre Emergentziak-Osakidetza no se solucionan con la subida del precio de la autoconcertación. La autoconcertación hace que los problemas se perpetúen en el tiempo sin dar soluciones inmediatas que es lo que necesita ahora mismo nuestro servicio.

Llevamos años arrastrando problemas estructurales con un equipo de gestión con una nula actitud negociadora y sin un plan estratégico definido por lo que el servicio sigue a la deriva. El aumentar solo el precio de la autoconcertación sin ninguna otra medida al respecto no soluciona ningún problema de Emergentziak-Osakidetza. El servicio no se puede basar en el sobreesfuerzo de los y las trabajadoras mientras el equipo de gestión sigue desaparecido y sin que hayan dado respuesta a las peticiones realizadas de los y las trabajadoras.

Respecto a que haya residentes realizando las labores de médicos de Emergencias, nos parece una tomadura de pelo que se plantee la contratación de médicos residentes en su periodo de formación para hacer las labores de un médico adjunto cuando los y las trabajadoras de Emergentziak no tienen carteleras bimestrales. Llevamos años denunciando el incumplimiento del artículo 35 del Acuerdo regulador de Osakidetza y seguiremos denunciando hasta que se cumpla la ley. Es necesario que los y las trabajadoras que no tienen carteleras tengan carteleras bimestrales, y actualmente con todos los turnos que hay sin cubrir incluso trimestrales o cuatrimestrales.

De mientras vemos un empeoramiento de los problemas que arrastramos desde hace años, con unos centros coordinadores agónicos, realizando más trabajo con menos personal, con una política de contratación que incumple la ley, con una gestión de carteleras pésimas. Emergentziak se hunde, se hunde de tal manera que ha habido más de 70 turnos sin cubrir durante junio y julio y la imposibilidad de atender como es debido a la población vasca.

Necesitamos la dimisión completa de todo el Equipo de Gestión, porque con su política de los últimos años lo único que han conseguido es que se hayan incrementado los problemas estructurales. Para dar una atención emergente sanitaria digna y de calidad es necesario un equipo de gestión que tenga un plan definido para este servicio con un talante negociador y un plan de contingencia urgente.

¡NECESITAMOS LA DIMISIÓN DE TODO EL EQUIPO DE GESTIÓN!